El informe mundial sobre el envejecimiento y la salud define el envejecimiento saludable como el “proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez”.
La población de personas mayores en Colombia cada día vive más; y a nivel mundial, las personas son cada vez más longevas. La vejez es una etapa con muchos cambios a nivel fisiológico, metabólico, emocional que afectan directamente las necesidades nutricionales y hábitos alimentarios.
Aceptar los años y estar preparados para cada etapa de la vida para vivirla a plenitud es una realidad que se debe inculcar desde temprana edad; asimismo, tener buenos hábitos de vida, sostenibles y duraderos.
Entre los cambios más significativos con la llegada de los años se encuentran:
- Sarcopenia (pérdida de masa muscular), dinapenia (pérdida de fuerza muscular) o desnutrición, generalmente ocasionado por caídas o fracturas, y con consecuencias como la dependencia a asistencia para caminar, subir escaleras, y levantarse de una silla.
- Cambios en aparato digestivo (estreñimiento o diarrea), óseo (osteoporosis), inmunológico (infecciones), renal (hiperplasia prostática, infecciones urinarias a repetición) o aumento de la masa grasa (sobrepeso u obesidad).
- Afectación del sueño y la microbiota intestinal. Enfermedades neurológicas asociadas a la edad como Alzheimer, deterioro cognitivo, demencia o depresión. Problemas dentales (pérdidas de dientes) o dificultad de la deglución. Alteración del gusto y el olfato. Disminución de absorción de Nutrientes como Calcio (Fracturas), Vitamina B12 (en veganos o vegetarianos) o Hierro (Anemia).
En Colombia, un adulto mayor se refiere a personas mayores de 60 años. Sin embargo, cada persona asume su vejez de manera diferente. Por su parte, el bienestar es el equilibrio entre mente, cuerpo, y espíritu, en el cual la alimentación influye directamente ya que su objetivo es cubrir las necesidades de energía con una mezcla balanceada de macronutrientes (carbohidratos, proteínas y grasa), micronutrientes (vitaminas, minerales, fibra), y del estado nutricional del individuo, su actividad física, enfermedades asociadas, medicamentos, entre otros.
Nutrientes de los lácteos y la importancia de su consumo para la longevidad
Proteína: Mantiene o evita la disminución de la masa muscular y el funcionamiento físico en general.
Grasa: fortalece la salud ósea y muscular.
Calcio y fósforo: favorece la salud ósea.
Otros micronutrientes: zinc, magnesio, yodo, selenio, vitamina B, péptidos bioactivos, ácidos de cadena corta y media.
Al incluir lácteos en la dieta diaria se aportan nutrientes importantes que ayudan a prevenir enfermedades como la diabetes, obesidad, enfermedades neurológicas, hipertensión y la mayoría de los tipos de cáncer. Además, los lácteos son versátiles para preparar recetas dulces y/o saladas, y en su mayoría, oscilan en precios cómodos para el consumidor tanto en supermercados, tiendas de barrio, y mercados locales.
Por otra parte, cada vez hay mayor conciencia ecológica, medioambiental y de sostenibilidad con la producción de estos alimentos desde su origen.
Lácteos infaltables:
Yogur, kumis, kéfir con probióticos: ayudan a la salud intestinal, el sistema inmunológico y la absorción de nutrientes.
Leche o queso: por su aporte de proteína y grasa son ideales para pacientes sarcopénicos, en bajo peso o con desnutrición.
Mantequilla y/o crema de leche: por su alto valor calórico son ideales para personas mayores, con bajo peso o desnutrición.
Según ENSIN (2005, 2010, 2015) en Colombia se evidencia un déficit de ingesta nutricional de calcio debido a que la mayoría de la población no alcanza a cubrir las recomendaciones diarias de consumo recomendadas. La desinformación en el consumo de lácteos también ha influenciado al consumidor final.
Recomendaciones de la autora:
- Incluir una porción de lácteos en cada comida principal.
- No olvidar la conexión que existe entre el alimento y el consumidor: los lácteos hacen parte de la identidad colombiana, están recomendados en las GABAS (Guías Alimentarias basadas en Alimentos), por la FAO y OMS, y son vitales en todas las etapas de la vida.
- A enamorarse de la leche y sus derivados y a consumirlos en cantidades adecuadas.
Paola Velásquez
Nutricionista Dietista – Universidad Javeriana







